Viajar entre pueblos y aldeas en Perú con un presupuesto ajustado es completamente posible y puede ser una experiencia enriquecedora. El transporte público es una de las mejores y más económicas opciones. Los colectivos, que son minibuses compartidos, son una manera popular y asequible de moverse entre localidades. Estos vehículos suelen salir cuando están llenos, lo que puede ser rápido y eficiente.
Además, los buses interprovinciales ofrecen conexiones entre ciudades más grandes y son una opción cómoda para distancias más largas. Asegúrate de comprar tus boletos con anticipación, especialmente durante la temporada alta de turismo.
En el Valle Sagrado, puedes explorar pueblos como Pisac y Ollantaytambo, donde los mercados locales ofrecen productos artesanales a buen precio. La mayoría de estos pueblos tienen alojamientos económicos, como hostales y casas de huéspedes, que también son una excelente manera de conocer a otros viajeros.
Si deseas una experiencia más auténtica, considera hacer caminatas o trekking entre pueblos, como el camino que va de Ollantaytambo a Aguas Calientes. Esto no solo te permitirá disfrutar de la naturaleza, sino también conocer a los lugareños y su cultura. Asegúrate de llevar suficiente agua y snacks para el camino.
Para moverte dentro de las aldeas, los taxis y tuk-tuks son opciones accesibles, aunque siempre es recomendable negociar el precio antes de abordar. También puedes optar por alquilar una bicicleta en algunas áreas, lo que te dará libertad para explorar a tu propio ritmo.
Recuerda que la comida local es generalmente económica, así que no dudes en probar los platos típicos en los mercados. Finalmente, siempre es útil aprender algunas frases en español para interactuar con los locales, lo que enriquecerá tu experiencia de viaje.
