El trekking de Vilcabamba, también conocido como el Camino de los Incas a Vilcabamba, es una de las rutas menos transitadas que conducen a las antiguas ruinas de la ciudadela inca de Vilcabamba. Este trekking tiene una duración promedio de 5 días, aunque algunos viajeros optan por hacerlo en 4 días dependiendo de su ritmo y condiciones físicas. El recorrido es de aproximadamente 70 kilómetros y ofrece impresionantes vistas de los Andes, así como una oportunidad única para experimentar la biodiversidad de esta región.
Durante el trekking, los excursionistas atravesarán diversos ecosistemas, desde bosques nublados hasta áreas de puna, donde se pueden avistar llamas y vicuñas. Es recomendable llevar ropa adecuada para el clima cambiante, así como suficiente agua y alimentos energéticos para el camino. Además, es importante aclimatarse a la altitud, ya que el trekking se realiza a altitudes que oscilan entre los 2,500 y 4,000 metros sobre el nivel del mar.
El trekking no solo ofrece paisajes espectaculares, sino también un profundo contacto con la cultura local. Los viajeros tendrán la oportunidad de interactuar con comunidades indígenas, que aún conservan costumbres ancestrales. Es una excelente manera de aprender sobre la vida andina y las tradiciones que perduran en el tiempo.
Se recomienda contratar un guía local, ya que ellos no solo conocen las rutas, sino que también pueden compartir historias y datos culturales sobre los incas y su civilización. Los grupos pequeños son preferibles, ya que permiten una experiencia más íntima y enriquecedora.
Es importante reservar con anticipación, especialmente durante la temporada alta de turismo, que va de mayo a septiembre. Los permisos para el trekking son limitados, así que asegúrate de asegurarte el tuyo con anticipación. Al finalizar el trekking, los viajeros pueden continuar su aventura hacia Machu Picchu, haciendo de este viaje una experiencia inolvidable en el corazón del antiguo imperio inca.
