Máncora y Punta Sal son dos de los destinos de playa más populares en el norte de Perú, ideales para quienes buscan relajarse después de explorar las maravillas de Machu Picchu y Cusco. Estas playas se encuentran en la región de Piura, a unas 18 horas en auto de Cusco, lo que las convierte en el lugar perfecto para disfrutar del sol y la arena tras una intensa aventura andina.
Máncora es conocida por su ambiente animado, su vida nocturna vibrante y sus excelentes opciones de alojamiento. Los visitantes pueden disfrutar de actividades como el surf, el kitesurf y paseos a caballo por la playa. Además, el clima cálido y soleado de Máncora garantiza que los turistas puedan disfrutar de sus hermosas playas durante todo el año.
Por otro lado, Punta Sal ofrece una experiencia más tranquila y lujosa. Con resorts de alta gama y un ambiente más relajado, es ideal para quienes buscan escapar del bullicio y disfrutar de un descanso reparador. Las aguas cálidas y cristalinas son perfectas para nadar, bucear y practicar snorkel.
Ambos destinos cuentan con una rica oferta gastronómica, destacando especialmente la comida marina. Los visitantes pueden deleitarse con platos típicos como el ceviche, que es un must en la costa peruana.
A la hora de planificar tu viaje, es recomendable llevar protector solar, sombreros y ropa ligera, ya que las temperaturas pueden ser bastante altas. También es aconsejable reservar hospedaje con anticipación, especialmente en temporada alta, que va de diciembre a abril.
No te olvides de explorar la cultura local, visitando mercados y disfrutando de la música y danzas tradicionales. En resumen, Máncora y Punta Sal son el complemento perfecto a la experiencia de visitar Machu Picchu, ofreciendo un balance ideal entre aventura, cultura y relax.