El rafting en Perú es una experiencia emocionante que combina la adrenalina con la belleza natural del paisaje andino. Entre las mejores ubicaciones para practicar rafting se encuentra el río Urubamba, que fluye a través del Sagrado Valle y ofrece tramos de diferentes niveles de dificultad. Este río, conocido por sus aguas bravas, es un lugar ideal para aventureros que buscan una actividad llena de acción después de visitar Machu Picchu.
Los tours de rafting suelen incluir guías experimentados que garantizan la seguridad y el disfrute de la actividad. Es recomendable reservar con anticipación, especialmente durante la temporada alta, que va de mayo a octubre. Los operadores de rafting ofrecen paquetes que incluyen el equipo necesario, como botes, remos, chalecos salvavidas y cascos.
Además de la emoción en el agua, el rafting en el Sagrado Valle permite disfrutar de impresionantes vistas de montañas y paisajes únicos. Muchos tours también ofrecen la opción de combinar el rafting con otras actividades, como caminatas o visitas a sitios arqueológicos, brindando una experiencia cultural enriquecedora.
Antes de ir, asegúrate de llevar ropa adecuada, como traje de baño, ropa ligera que se seque rápido y sandalias. También es importante llevar protector solar y una cámara a prueba de agua para capturar los momentos memorables. Si eres nuevo en el rafting, no te preocupes; hay opciones para principiantes y expertos por igual.
Finalmente, después de un día emocionante en el agua, puedes relajarte en uno de los acogedores lodges del Sagrado Valle o disfrutar de la gastronomía local. No olvides probar el famoso cuy chactado o el ceviche en los restaurantes cercanos. El rafting es una actividad que seguramente enriquecerá tu visita a Perú y complementará tu experiencia en Machu Picchu.
