La gastronomía peruana es reconocida a nivel mundial, y uno de sus platos nacionales más emblemáticos es el ceviche. Este delicioso plato, elaborado a base de pescado crudo marinado en jugo de limón, se sirve típicamente con cebolla roja, ají y acompañado de camote (batata) y choclo (maíz). En la región de Machu Picchu, y en general en todo el Perú, el ceviche no solo es un manjar, sino también una tradición cultural que refleja la riqueza de los recursos marinos del país.
Al visitar Cusco y el Valle Sagrado, tendrás la oportunidad de degustar ceviche fresco en los numerosos restaurantes locales. Asegúrate de preguntar por el ceviche del día, ya que la frescura del pescado es clave para disfrutar de este plato. Sin embargo, si no te gusta el pescado crudo, existen otras variaciones como el ceviche de pollo o de champiñones.
Además del ceviche, otro plato nacional que no puedes dejar de probar es el lomo saltado, un salteado de carne de res con cebolla, tomate y papas fritas, servido con arroz. Este plato fusiona la cocina peruana con influencias chinas, resultado de la inmigración en el siglo XIX.
Cuando te encuentres en Machu Picchu, es recomendable llevar un bocadillo ligero, ya que la mayoría de los restaurantes están ubicados en Aguas Calientes, la ciudad más cercana al sitio arqueológico. Aquí, podrás disfrutar de la gastronomía local después de una larga caminata por las ruinas.
Para los amantes de la aventura, el ceviche también puede ser una opción rápida y nutritiva antes de emprender un trekking. Recuerda que el agua y los alimentos deben ser consumidos con precaución; opta por comer en lugares recomendados y asegúrate de que el pescado esté fresco.
Finalmente, si deseas llevar un poco de Perú contigo, considera comprar un libro de recetas peruanas o ingredientes típicos como ají amarillo o la salsa de rocoto. La experiencia culinaria de Perú es tan rica como su historia y paisajes, así que asegúrate de disfrutarla al máximo durante tu visita a Machu Picchu.
