El clima en Machu Picchu es un factor crucial para considerar al planificar tu visita a este icónico destino peruano. Esta maravilla del mundo se encuentra en la región andina, a unos 2,430 metros sobre el nivel del mar, lo que le confiere un clima templado y húmedo. La temperatura promedio durante el día oscila entre los 20 y 25 grados Celsius, mientras que por la noche puede bajar a unos 10 grados Celsius.
El año en Machu Picchu se divide en dos estaciones principales: la temporada seca, que va de mayo a octubre, y la temporada de lluvias, de noviembre a abril. Durante la temporada seca, el clima es más favorable para el trekking y la exploración, ya que hay menos probabilidades de lluvias. Sin embargo, las mañanas pueden ser frías, así que es recomendable llevar ropa adecuada, incluyendo un abrigo ligero.
En contraste, la temporada de lluvias trae consigo un clima más cálido pero también más húmedo, con lluvias frecuentes, especialmente en enero y febrero. Si decides visitar en esta época, considera que algunas rutas de senderismo pueden estar cerradas debido a deslizamientos de tierra.
Es importante también tener en cuenta que el clima puede cambiar rápidamente en Machu Picchu. Por lo tanto, llevar capas de ropa y un impermeable puede ser útil. Además, la alta humedad puede hacer que la sensación térmica sea más intensa, así que mantente hidratado.
Los meses más concurridos son de junio a agosto, por lo que si prefieres evitar las multitudes, considera visitar en abril o septiembre. No olvides que la luz del sol puede ser intensa, así que lleva protector solar y un sombrero.
Finalmente, al planificar tu visita, ten en cuenta que el clima puede influir en el horario de los buses y trenes hacia Machu Picchu. Verifica las condiciones climáticas antes de tu viaje y prepárate para disfrutar de esta experiencia única en uno de los lugares más emblemáticos del mundo.
