Cuando se trata de explorar Machu Picchu y sus impresionantes paisajes, es esencial contar con energía suficiente para disfrutar de cada momento. En Perú, hay una variedad de alimentos energéticos que no solo son deliciosos, sino también nutritivos, ideales para quienes se aventuran en esta maravilla del mundo.
Uno de los alimentos más populares es la quinua, un grano andino lleno de proteínas y minerales que proporciona energía duradera. Puedes disfrutarla en ensaladas o como acompañamiento en platos tradicionales.
Además, las papas son un alimento básico en la dieta peruana. Existen más de 3,000 variedades de papas en el país, y son una excelente fuente de carbohidratos que te mantendrán activo durante tu excursión.
Las frutas tropicales como el mango y la piña son refrescantes y ricas en vitaminas, perfectas para mantenerte hidratado y energizado, especialmente en los días calurosos en la región de Cusco.
Si buscas un impulso instantáneo, no te olvides de los snacks de energía locales, como las barritas de avena y frutos secos, que son fáciles de llevar en tu mochila.
También es recomendable probar el mate de coca, una infusión que ayuda a combatir la altitud y proporciona energía. Puedes encontrarlo en muchos mercados y restaurantes en Cusco y el Valle Sagrado.
Durante tu visita, asegúrate de degustar el famoso cuy chactado, un plato tradicional que, aunque puede parecer inusual, es muy nutritivo y lleno de sabor.
Recuerda mantenerte bien hidratado; las aguas saborizadas con frutas locales son una excelente opción. También puedes probar el chicha morada, una bebida refrescante hecha de maíz morado que es rica en antioxidantes.
Finalmente, al visitar mercados locales, podrás encontrar una variedad de alimentos frescos y saludables que te brindarán la energía necesaria para explorar Machu Picchu y sus alrededores con vitalidad.
