Proceso

El proceso de visitar Machu Picchu es una experiencia inolvidable que combina aventura, historia y cultura. Antes de comenzar tu viaje, es esencial planificar con anticipación. Primero, asegúrate de reservar tus boletos de entrada a Machu Picchu, ya que el acceso es limitado y se recomienda hacerlo con semanas de antelación.

Una vez en Perú, la mayoría de los visitantes llegan a Cusco, la antigua capital del Imperio Inca. Desde Cusco, puedes optar por tomar un tren hacia Aguas Calientes, el pueblo cercano a Machu Picchu. El viaje en tren ofrece vistas espectaculares del paisaje andino, por lo que es recomendable llevar tu cámara lista.

Al llegar a Aguas Calientes, hay varias opciones de alojamiento, desde hostales económicos hasta hoteles de lujo. Te aconsejamos que reserves tu alojamiento con antelación, especialmente durante la temporada alta. Desde Aguas Calientes, el acceso a Machu Picchu es fácil; puedes optar por tomar un autobús o hacer una caminata de aproximadamente una hora.

Una vez dentro de Machu Picchu, es fundamental seguir las reglas del sitio, como no tocar las estructuras y respetar el medio ambiente. Aprovecha las visitas guiadas para aprender sobre la historia y la arquitectura de esta maravilla del mundo. También puedes explorar por tu cuenta, pero asegúrate de tener un mapa o una buena guía.

Recuerda llevar agua, protector solar y un sombrero, ya que el clima puede ser impredecible. Después de tu visita, considera explorar el resto del Valle Sagrado, donde encontrarás otros sitios arqueológicos fascinantes como Ollantaytambo y Pisac. Finalmente, no olvides probar la deliciosa gastronomía peruana en los restaurantes locales antes de regresar a Cusco.