El trekking de aventura en Perú es una experiencia inolvidable que combina paisajes asombrosos, cultura rica y el desafío físico de caminar por senderos antiguos. Uno de los destinos más emblemáticos para esta actividad es Machu Picchu, donde los viajeros pueden optar por rutas como el Camino Inca o la ruta Salkantay.
El Camino Inca es una caminata de cuatro días que lleva a los excursionistas a través de montañas, bosques y sitios arqueológicos, culminando en la famosa ciudadela inca. Por otro lado, la ruta Salkantay ofrece un recorrido más desafiante, con vistas espectaculares del nevado Salkantay y una inmersión en las comunidades locales.
Una de las mejores épocas para realizar trekking en Perú es durante la temporada seca, de mayo a septiembre, cuando las condiciones climáticas son más favorables. Sin embargo, es importante reservar con anticipación, especialmente para el Camino Inca, ya que el número de permisos es limitado.
Los turistas deben estar preparados físicamente, ya que algunas de las etapas incluyen ascensos empinados y altitudes elevadas. Es recomendable hacer un chequeo médico y aclimatarse en Cusco antes de comenzar la aventura. Además, llevar ropa adecuada y calzado cómodo es fundamental para una experiencia placentera.
Durante el trekking, los viajeros tienen la oportunidad de interactuar con la cultura local, probando platos típicos como el cuy chactado y la pachamanca, así como aprendiendo sobre las tradiciones de las comunidades que habitan en la región.
También es esencial llevar suficiente agua y snacks energéticos, así como cuidar el medio ambiente, siguiendo el principio de no dejar huella. Finalmente, no olvides tu cámara para capturar los impresionantes paisajes y momentos únicos en el camino hacia Machu Picchu.
