Cuando se piensa en Perú, muchos viajeros se imaginan Machu Picchu y la cultura inca, pero el país también ofrece hermosas playas que complementan la experiencia de viaje. Desde Piura hasta Arequipa, las costas peruanas son un destino ideal para aquellos que buscan combinar la aventura de las montañas con el relax del mar.
Una de las playas más populares es Máncora, situada en el norte del país. Con su clima cálido y sus aguas cristalinas, es perfecta para practicar surf, buceo y disfrutar de una vibrante vida nocturna. Máncora también cuenta con una variedad de restaurantes que ofrecen deliciosa gastronomía marina.
Si deseas un ambiente más tranquilo, considera visitar Vichayito o Las Pocitas, donde puedes relajarte en un entorno más sereno. Además, estas playas son ideales para disfrutar de pescados frescos y cocteles de frutas tropicales.
Desde las playas del norte, es posible organizar un viaje a Cusco y Machu Picchu. Muchos turistas optan por volar a Cusco después de disfrutar de la playa, lo que facilita el acceso a las maravillas arqueológicas de la región. No olvides aclimatarte a la altitud antes de realizar el trekking hacia Machu Picchu.
Un consejo práctico es reservar tus entradas a Machu Picchu con anticipación, ya que el lugar puede estar muy concurrido, especialmente durante la temporada alta. Además, considera la posibilidad de hacer el Camino Inca si te sientes aventurero. Esta ruta te llevará por paisajes impresionantes y sitios arqueológicos a lo largo del camino.
No olvides empacar protector solar y ropa ligera para las playas, así como ropa abrigadora para Cusco, ya que las temperaturas pueden variar significativamente. También es recomendable llevar calzado cómodo para las caminatas.
Finalmente, recuerda que la mezcla de playa y montaña que ofrece Perú permite vivir una experiencia única, llena de contrastes y maravillas naturales. Cada región tiene su propio encanto y vale la pena explorar tanto las playas como las alturas de los Andes.
