Durante la temporada seca en Machu Picchu, que va de mayo a octubre, las temperaturas son generalmente frescas y agradables, lo que hace de este un momento ideal para visitar esta maravilla del mundo. En los meses de junio y julio, las temperaturas diurnas oscilan entre 20°C y 25°C, mientras que las noches pueden ser bastante frías, bajando a 5°C a 10°C.
La temporada seca se caracteriza por cielos despejados y escasas precipitaciones, lo que permite disfrutar de vistas impresionantes de las montañas y la vegetación circundante. Sin embargo, es importante estar preparado para las fluctuaciones de temperatura. Se recomienda llevar ropa en capas, incluyendo una chaqueta ligera para las noches frías y una camiseta de manga corta para el calor del día.
La altitud de Machu Picchu, que se encuentra a aproximadamente 2,430 metros sobre el nivel del mar, puede afectar la temperatura y el clima. Por lo tanto, es aconsejable aclimatarse adecuadamente antes de realizar la caminata hacia las ruinas. Esto no solo ayudará a adaptarse a la altitud, sino que también permitirá disfrutar más de la experiencia.
Otro aspecto a considerar es la humedad, que es más baja durante la temporada seca. Esto significa que el aire es más fresco y seco, lo que es ideal para la exploración. Sin embargo, los visitantes deben recordar que el sol puede ser bastante fuerte durante el día, así que es esencial aplicar protector solar y llevar un sombrero para protegerse.
Además, la temporada seca atrae a más turistas, lo que puede resultar en multitudes en los principales puntos de interés. Es recomendable planificar las visitas a las atracciones más populares con anticipación y considerar horarios menos concurridos para disfrutar de la experiencia.
No olvide llevar suficiente agua y snacks, ya que las caminatas por Machu Picchu pueden ser agotadoras. Los senderos pueden ser empinados y requieren un poco de esfuerzo, así que estar bien preparado es clave para disfrutar de su visita. En resumen, la temporada seca en Machu Picchu ofrece un clima ideal para explorar, siempre y cuando se tomen las precauciones adecuadas para manejar las variaciones de temperatura.
