Machu Picchu es uno de los destinos turísticos más emblemáticos del mundo y, como tal, tiene una capacidad de visitantes restringida para preservar su integridad cultural y natural. Desde el 2021, el gobierno peruano implementó nuevas regulaciones que limitan el número de visitantes diarios a 2,500 personas. Esta medida busca proteger las ruinas y el entorno, garantizando una experiencia más enriquecedora para todos los que lo visitan.
Al planificar tu viaje a Machu Picchu, es fundamental reservar tus boletos con anticipación, especialmente durante la temporada alta, que va de junio a agosto. Las entradas se pueden adquirir online, y se recomienda hacerlo al menos con un mes de antelación para asegurar tu lugar.
Los visitantes tienen acceso al sitio en franjas horarias específicas, así que asegúrate de elegir un horario que te permita disfrutar del amanecer o el atardecer, momentos mágicos para captar fotografías. Además, es importante recordar que la caminata por el Camino Inca también tiene un límite de 500 personas por día, lo que incluye guías y porteadores.
En el sitio, se fomenta el respeto por el entorno. Se prohíbe el uso de drones y se debe seguir las indicaciones de los guías para evitar el deterioro de las estructuras. Recuerda llevar una botella de agua reutilizable y snacks, ya que no hay servicios de venta dentro del sitio arqueológico.
La vestimenta adecuada es clave para disfrutar de la visita. Usa calzado cómodo y ligero y lleva ropa adecuada para el clima, que puede ser impredecible. No olvides tu protector solar y repelente de insectos.
Además, considera extender tu visita a otros lugares cercanos en el Valle Sagrado o en Cusco, donde puedes explorar aún más sobre la cultura inca.
Finalmente, recuerda que Machu Picchu es más que una simple atracción turística; es un símbolo de la historia y la cultura peruana, y cada visita contribuye a su conservación y apreciación.