La cocina peruana es famosa por su diversidad y riqueza cultural, influenciada por las tradiciones indígenas, la conquista española y la inmigración de diversas culturas. En el viaje a Machu Picchu y Cusco, los turistas pueden descubrir algunas técnicas de cocción que han sido fundamentales en la preparación de platos típicos.
Una de las técnicas más populares es la cocción al vapor, utilizada para preparar platos como el pachamanca, donde se cocinan carnes y vegetales envueltos en hojas y enterrados con piedras calientes. Esta técnica no solo resalta los sabores naturales, sino que también está enraizada en la tradición andina.
Otra técnica común es la asar, especialmente en la preparación de anticuchos, brochetas de corazón de res marinado y asado a la parrilla. Los anticuchos son una delicia que se puede encontrar en muchos puestos de comida en Cusco y el Valle Sagrado.
El hervido también es esencial en la cocina peruana. Platos como la sopa seca o el chupe de camarones se preparan hirviendo los ingredientes para extraer sus sabores y nutrientes.
Además, la freír es otra técnica que se utiliza ampliamente; por ejemplo, la papa a la huancaína es un plato que incluye papas hervidas y luego servidas con una salsa de queso que se puede preparar en una sartén.
Los turistas que visitan Machu Picchu y Cusco deben aprovechar para probar el ceviche, que se prepara en crudo, marinando pescado fresco en jugo de limón y especias, una forma de cocción que resalta la frescura de los ingredientes.
Para disfrutar de una experiencia auténtica, es recomendable asistir a talleres de cocina donde se pueden aprender estas técnicas de la mano de chefs locales. Además, no olvide visitar mercados locales, donde se pueden encontrar ingredientes frescos y aprender más sobre las tradiciones culinarias.
Finalmente, recordar que la gastronomía peruana ha sido reconocida a nivel mundial. Así que, al explorar Cusco y Machu Picchu, ¡no se olvide de saborear cada bocado!