Arequipa, conocida como la "Ciudad Blanca" por sus edificios de sillar, es un destino imperdible en Perú. Esta ciudad ofrece un rico patrimonio cultural y arquitectónico, además de impresionantes paisajes naturales. El Monasterio de Santa Catalina es una de las joyas de Arequipa, un vasto complejo que parece una ciudad dentro de la ciudad, donde los visitantes pueden explorar calles empedradas, plazas coloridas y hermosas capillas. La Plaza de Armas, rodeada de majestuosos edificios coloniales, es el corazón de Arequipa y un excelente lugar para disfrutar de un café mientras observas la vida cotidiana.
Otro punto destacado es el Mirador de Yanahuara, que ofrece vistas espectaculares del volcán Misti y el paisaje urbano. Los turistas también pueden visitar el Museo Santuarios Andinos, donde se encuentra la famosa momia Juanita, una niña inca sacrificada hace más de 500 años.
Arequipa es también el punto de partida para explorar el Cañón del Colca, uno de los cañones más profundos del mundo, ideal para hacer senderismo y observar cóndores en su hábitat natural. Para los amantes de la gastronomía, Arequipa es famosa por su cocina, así que no te pierdas platos típicos como el rocoto relleno y el adobo arequipeño.
Si planeas visitar Machu Picchu, Arequipa puede ser una excelente parada en tu itinerario. Desde aquí, puedes tomar un vuelo a Cusco y luego un tren hacia Machu Picchu. Asegúrate de programar tu visita a la ciudad con anticipación, ya que hay mucho que ver y hacer. Consejo práctico: No olvides aclimatarte a la altitud y beber mucha agua para evitar el mal de altura.
Por último, la mejor época para visitar Arequipa es durante la estación seca, de mayo a septiembre, cuando el clima es más agradable. Con su mezcla de cultura, historia y naturaleza, Arequipa es un lugar que definitivamente merece ser explorado antes de dirigirse a la mágica Machu Picchu.