Las aguas termales de Lares son una de las maravillas naturales que se pueden disfrutar en Perú, especialmente después de una excursión a Machu Picchu. Ubicadas en la región de Cusco, estas aguas termales son conocidas por sus propiedades curativas y relajantes. A diferencia de otros baños termales en Perú, como Colca o Santa Teresa, las aguas de Lares ofrecen un entorno más tranquilo y auténtico, rodeado de hermosos paisajes andinos.
Las aguas termales de Lares se encuentran a unos 30 minutos en auto desde el pueblo de Lares y son fácilmente accesibles para los turistas. Este destino se ha vuelto popular entre aquellos que realizan el trek de Lares hacia Machu Picchu, ya que permite a los viajeros relajarse y recuperarse después de la caminata. La temperatura de las aguas oscila entre los 38 y 46 grados Celsius, lo que proporciona un alivio perfecto para los músculos cansados.
Además de su atractivo natural, las aguas termales de Lares están rodeadas de una rica cultura local. Los visitantes pueden interactuar con la comunidad indígena que habita en la zona, ofreciendo una experiencia cultural única. Muchos viajeros también aprecian la oportunidad de disfrutar de un baño termal al aire libre mientras contemplan las impresionantes vistas de los Andes.
En comparación con otros baños termales, como los de Chivay o Aguas Calientes, Lares tiende a ser menos concurrido, lo que permite una experiencia más íntima. Sin embargo, es importante tener en cuenta que Lares no cuenta con las mismas comodidades modernas que algunos de los otros destinos termales. Los turistas deben estar preparados para una experiencia más rústica y auténtica.
Para aquellos que planean visitar Lares, es recomendable llevar traje de baño, toallas y, si es posible, un poco de efectivo para comprar refrescos o snacks en los alrededores. Las mejores épocas para visitar son durante la temporada seca, de mayo a octubre, cuando el clima es más favorable.
En resumen, las aguas termales de Lares ofrecen una experiencia única que se compara favorablemente con otros baños termales en Perú. Con su combinación de belleza natural, cultura local y tranquilidad, son una excelente adición a cualquier itinerario de viaje hacia Machu Picchu.
