La aclimatación a la altitud en Cusco es un aspecto crucial para cualquier viajero que planea realizar trekking hacia Machu Picchu. A una altitud de 3,400 metros sobre el nivel del mar, Cusco puede presentar síntomas de mal de altura, como dolor de cabeza, náuseas y fatiga. Para aclimatarte, es recomendable llegar a Cusco al menos dos o tres días antes de comenzar tu trekking. Durante este tiempo, toma cosas con calma y evita el esfuerzo físico excesivo.
Una buena práctica es beber abundante agua y consumir infusiones de hojas de coca, que son utilizadas tradicionalmente por los locales para combatir el mal de altura. Además, procura alimentarte con comidas ligeras y ricas en carbohidratos, como el arroz y las papas. Evita el alcohol y las comidas pesadas que pueden dificultar tu aclimatación.
También es útil realizar actividades suaves, como paseos por la ciudad o visitas a lugares cercanos, para permitir que tu cuerpo se adapte gradualmente a la altitud. Escucha a tu cuerpo y, si experimentas síntomas severos, no dudes en buscar atención médica.
Considera la posibilidad de hacer un recorrido por el Valle Sagrado antes de llegar a Machu Picchu, ya que algunas áreas están a menor altitud y te ayudarán en el proceso de aclimatación. Por último, recuerda que cada persona reacciona de manera diferente a la altitud, así que no te desanimes si otros viajeros parecen aclimatarse más rápido que tú. Disfruta de la belleza de Cusco y su rica cultura, que te ofrecerá una experiencia inolvidable mientras te preparas para tu aventura en Machu Picchu.