Durante el Inca Jungle Trek, una de las experiencias más emocionantes que pueden disfrutar los viajeros que buscan llegar a Machu Picchu, hay varias opciones de alojamiento que permiten vivir la cultura local y descansar después de un día lleno de aventuras.
El trekking generalmente incluye tres noches de alojamiento. La primera noche se pasa en un albergue o una casa de familia en Santa María, donde los viajeros pueden experimentar la hospitalidad de los lugareños y conocer su estilo de vida. Este es un buen momento para probar la cocina local, que incluye platos como el cuy chactado o la pachamanca.
La segunda noche se suele pasar en Santa Teresa, donde hay opciones de hospedaje que van desde hostales sencillos hasta opciones más cómodas. Aquí, los viajeros pueden disfrutar de actividades como baños termales en las cercanías, ideales para relajar los músculos después de una larga jornada de caminata.
La última noche antes de llegar a Machu Picchu se realiza en Aguas Calientes, el pueblo que se encuentra al pie de la famosa ciudadela inca. Este lugar ofrece una amplia gama de alojamientos, desde hoteles de lujo hasta hostales económicos. Muchas de estas opciones están diseñadas para satisfacer las necesidades de los turistas y brindar un descanso cómodo.
Es recomendable reservar el alojamiento con antelación, especialmente durante la temporada alta, entre junio y agosto, para asegurarte un lugar donde descansar.
Además, es importante llevar un saco de dormir ligero si tu trekking lo incluye, ya que algunas noches pueden ser frescas. La experiencia del Inca Jungle Trek no solo te proporciona una aventura inolvidable, sino también la oportunidad de conocer la cultura peruana a través de su hospitalidad y su deliciosa gastronomía.
Así que, al planear tu viaje, considera las diferentes opciones de alojamiento y elige la que mejor se adapte a tus preferencias y presupuesto. Te aseguramos que cada parada en el camino enriquecerá tu experiencia en Perú.
