Perú es un país hermoso y lleno de historia, pero también está ubicado en una zona sísmica activa, lo que significa que los terremotos pueden ocurrir. Si te encuentras en Machu Picchu o en otras áreas del país durante un terremoto, es esencial saber cómo reaccionar adecuadamente.
Primero, mantén la calma. Es natural sentir miedo, pero recuerda que la mayoría de los edificios en Perú, incluidos los sitios turísticos, están diseñados para resistir temblores. Si estás en Machu Picchu, busca un lugar seguro como un área despejada lejos de estructuras que puedan colapsar.
Si estás en Cusco o en el Valle Sagrado, sigue las mismas pautas: aléjate de ventanas y objetos que puedan caer. Si estás en un lugar elevado, como el Huayna Picchu, busca refugio bajo una roca sólida.
Es fundamental escuchar las instrucciones de los guías turísticos o del personal del lugar, ya que ellos están entrenados para manejar estas situaciones. También es recomendable tener un plan de emergencia y conocer las rutas de evacuación antes de iniciar tu viaje.
Además, lleva contigo un pequeño kit de emergencia que incluya agua, alimentos no perecederos y una linterna. Durante los terremotos, es común que se produzcan cortes de electricidad, así que estar preparado puede hacer la diferencia.
Después del temblor, evita entrar a edificios dañados y mantente alejado de áreas donde puedan ocurrir deslizamientos de tierra, especialmente en zonas montañosas como Machu Picchu.
Finalmente, recuerda que aunque los terremotos pueden ser aterradores, son eventos naturales que forman parte de la vida en Perú. La cultura local es resiliente y los peruanos están acostumbrados a lidiar con estos fenómenos. Aprender sobre su historia y cómo han enfrentado desastres naturales puede ser una experiencia enriquecedora durante tu visita.