Viajar sola por Perú es una experiencia enriquecedora que ofrece un sinfín de oportunidades para explorar y disfrutar de la cultura única de este país. Machu Picchu, una de las maravillas del mundo, es un destino imperdible para cualquier viajera. Para llegar, puedes optar por el tren desde Cusco, que ofrece vistas espectaculares del paisaje andino. Además, hay varias rutas de senderismo, como el Inca Trail, que requieren un poco más de planificación pero recompensan con vistas inolvidables.
Al llegar a Machu Picchu, es recomendable contratar un guía local que te sumerja en la historia y la cultura de este antiguo sitio. En Cusco, la antigua capital del imperio inca, puedes disfrutar de su arquitectura colonial y mercados vibrantes, como el Mercado de San Pedro, donde puedes probar la deliciosa gastronomía peruana.
Cuando viajes sola, es esencial estar atenta a tu seguridad. Mantén tus pertenencias cerca y evita mostrar objetos de valor. La hospitalidad peruana es notable, y muchas personas están dispuestas a ayudarte si te pierdes o necesitas información.
Además, es aconsejable aprender algunas frases en español, ya que aunque en los lugares turísticos se habla inglés, no todos lo dominan. Un buen consejo es unirte a grupos de viajantes en plataformas sociales, lo que puede hacer tu experiencia más social y menos solitaria.
No olvides probar el ceviche, un plato emblemático que debes degustar en la costa, y la pachamanca, que es una delicia andina. En general, el transporte público es una opción segura y económica para moverte entre ciudades y pueblos.
Finalmente, asegúrate de tener tu documentación en regla y de estar informada sobre las costumbres locales. Viajar sola por Perú no solo es seguro, sino que también es una oportunidad para descubrir más sobre ti misma y conectar con la rica cultura de este país.
